En el principio Dios creó al hombre a su imagen y semejanza. Después, en un descuido (pestañazo) que dió ese nuevo ser noble, sensible e inteligente, Dios le hizo una compañera a partir de su costilla (dicen que nunca segundas partes fueron buenas y creo que este es el primer y mejor ejemplo). Pasó el tiempo y Eva, llevada por la codicia, hizo gala de sus artes culinarias y preparó un exquisito pay de manzana (dicen que al hombre se le llega por el estómago). En el momento en que el ingenuo y confiado hombre fué seducido por la mirada centelleante y la voz melosa de su pareja y cedió a la tentación de probar el fruto prohibido, fué desterrado del Edén (curioso que se le haya dado mayor importancia a la falla del hombre que a la de la mujer).
Desde entonces, una de las sentencias que se dictó a la mujer fué: "parirás hijos con dolor". Y es así que veintiún siglos después vemos cómo las mujeres continúan siendo las portadoras, durante 9 meses, de nuestros vástagos. La historia de la humanidad ha visto cómo por este proceso han tenido que pasar Hipócrates, Solón, Pitágoras, Isaac Newton, Leonardo Da Vinci y los padres de la cirugía, la medicina interna y la pediatría. Así, la Obstetricia, la rama de la medicina que trata sobre el embarazo, el parto y sus complicaciones, es la MADRE DE TODAS LAS CIENCIAS.
Desde entonces, una de las sentencias que se dictó a la mujer fué: "parirás hijos con dolor". Y es así que veintiún siglos después vemos cómo las mujeres continúan siendo las portadoras, durante 9 meses, de nuestros vástagos. La historia de la humanidad ha visto cómo por este proceso han tenido que pasar Hipócrates, Solón, Pitágoras, Isaac Newton, Leonardo Da Vinci y los padres de la cirugía, la medicina interna y la pediatría. Así, la Obstetricia, la rama de la medicina que trata sobre el embarazo, el parto y sus complicaciones, es la MADRE DE TODAS LAS CIENCIAS.
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